martes, 15 de mayo de 2012

Nuestras tardes olían a wisky y a cigarro.
Las noches a calle no me dejes sola.
-Muñeca, lo que buscas no es.
-Perro, no pienses en el futuro, besame ahora que mañana no existe.

Ella dejo la ciudad una madrugada fría.
No volvería a verlo.
Él lo supo y jamás la busco.